Segmentar los vasos retinianos a partir de una imagen de fondo de ojo y medir sobre ellos algunas propiedades geométricas con el fin establecer relaciones objetivas.

El árbol vascular retiniano es capaz de indicar el estado del resto de los vasos del cuerpo humano de una forma no invasiva o mínimamente invasiva. Su afectación influye en la toma de decisiones terapéuticas en pacientes con riesgo cardiovascular o en otras enfermedades en que los vasos pueden estar alterados.

Las alteraciones vasculares que se producen en enfermedades sistémicas inducen habitualmente unas modificaciones concretas en los vasos sanguíneos como cambios en los ángulos de cruce entre venas y arterias, en los ángulos de bifurcación y cambios en el calibre. Basándose en este hecho, el presente proyecto se centra en el desarrollo de un sistema capaz de detectar los vasos retinianos de forma automática para, posteriormente, medir sobre ellos citados aspectos, permitiendo establecer relaciones objetivas, determinar el riesgo cardiovascular o de otras enfermedades, así como también observar su progresión y la respuesta a diferentes tratamientos.

El sistema resultante del proyecto se ha utilizado en un estudio clínico para discriminar entre una vascularización normal y una patología cardiovascular. Sus resultados se han comparado con el diagnóstico proporcionado por un experto oftalmólogo tras la inspección visual de la imagen. 

Además, el sistema se quiere usar para estudiar la arquitectura microvascular retiniana de niños con bajo peso al nacer, analizando la relación existente entre las medidas obtenidas en estos niños y enfermedades como la hipertensión y problemas cardiovasculares en la vida adulta, utilizando de este modo sus resultados como un marcador pronóstico de este tipo de patologías.